El cultivo de frutos secos, y el pistacho en particular, se están presentando al agricultor como una apuesta segura, pero … ¿Cuánto hay de mito y de verdad en todo ello?

Continuando con nuestra serie de publicaciones conmemorando el 26 de febrero como el #DiaMundialDelPistacho, en esta ocasión hemos querido centrarnos en aspectos más técnicos y comerciales a la hora de plantearse cultivar una explotación de pistachos.
Ventajas del cultivo del Pistacho



Estamos, sin duda, en el momento ideal si ya disponemos de una explotación en producción de pistacheros. Pero tampoco es malo plantearnos iniciar un cultivo de este fruto seco. Le presentamos una serie de argumentos:
- Es un cultivo muy rentable: Debido a la buena fama que está adquiriendo como alimento, a nivel mundial es un producto con una demanda en crecimiento exponencial.
- Es el momento propicio de cultivar: En el caso de España no existe producción ni tradición suficiente para atender a la demanda interior, por lo que actualmente es un país comprador de pistacho. También se está apoyando institucionalmente y surgen oportunidades de inversión exterior.
- Demanda en aumento constante: En general, está creciendo el consumo de los frutos secos, pero el pistacho ha traspasado rápida y fácilmente las barreras culturales en la cocina. Mantiene una tradición de consumo ancestral en Asia, el mayor mercado del mundo. Se cotiza bien el producto de calidad, así como los cultivos en modalidad ecológica.
- Productores mundiales atraviesan dificultades puntuales: Problemas de producción en California y el bloqueo económico a Irán, han propiciado que los dos mayores exportadores mundiales hayan sufrido una bajada puntual en la producción, con el correspondiente aumento del precio, abriendo una ventana de oportunidad importante a otros países productores.
- El pistachero es un árbol que se adapta a muchos tipos de suelo: El pistacho se adapta bien a muchos tipos de suelo, pero se desarrolla bien en suelos poco profundos y algo calcáreos. Tolera bien suelos moderadamente salinos. A la vez, hay que tener en cuenta algunos condicionantes del suelo, algo que podría considerarse un inconveniente.
Inconvenientes en el cultivo del Pistacho



Pero no se trata de dejarnos cegar por el buen momento puntual que atraviesa este cultivo, hemos de ser conscientes de las dificultades y problemas con los que hemos de enfrentarnos, para estar preparados para sortearlos… si es que estamos en disposición de hacerlo:
- Es un cultivo que tarda en rentabilizarse: Es arriesgado dar datos concretos sin hablar de las condiciones y variedades concretas, pero se puede estimar que una finca de pistacheros no comienza a producir antes del 6º año desde su siembra, su producción plena puede llegar a alcanzarse en su 10º año y su amortización se podría alcanzar a los 35 años. Cualquier economista recomendaría huir de hacer apuestas a largo plazo, por lo que exige planificar muy bien su implantación.
- Poca tradición técnica nacional: Al ser un cultivo poco extendido, es complicado acceder a productos y conocimientos para, por ejemplo, el tratamiento de plagas o técnicas del cultivo. Afortunadamente existen centros de investigación, como “El Chaparrillo” en Castilla la Mancha, en el que se dedican a realizar la labor encomiable de difusión del conocimiento.
- Mercado nacional poco estable: Dado que no se puede considerar un volumen neto de producción importante en España, los precios dependen mucho de los grandes productores mundiales. Es un sector que necesita un diseño cimentado en experiencias anteriores como la de la almendra.
- Los productores se encuentran aislados: Los agricultores actúan individualmente y no existe una infraestructura de suministro, no hay muchos operadores nacionales, en el contexto de una producción mundial en ascenso. Afortunadamente están surgiendo asociaciones, que tratan de orientan al agricultor y favorecen la estabilidad de un incipiente mercado.
- El suelo ideal para el pistacho es del tipo Franco o Franco – Arenoso. Los suelos con más de un 30 % de arcilla no se aconsejan para el pistacho, ya que este cultivo no se desarrolla bien con excesos de humedad en el suelo y en este tipo de suelos la velocidad de permeabilidad es muy lenta, por lo que el agua permanece mucho tiempo en el medio. Antes de realizar una plantación de pistacho se aconseja realizar un análisis de suelo.